Las fuerzas políticas representadas hoy en el Congreso y en el resto de instituciones españolas se muestran insensibles ante el estado de necesidad que sufre una gran mayoría de españoles. Luz Belinda Rodríguez, presidente nacional de LIBRES y diputada en el Parlamento de Andalucía, igual que muchos de sus conciudadanos, huérfanos de partido, sintiéndose carentes de representación entendió que, ahora más que nunca, se manifiesta la necesidad de crear un nuevo proyecto político que corrija esta carencia, cercano a ellos y con ellos, para obtener una representatividad real, transparente y leal en las instituciones.
El partido LIBRES quiere identificar la realidad práctica y palpable de los españoles, esos pequeños problemas que si no se tratan a tiempo llegan a convertirse en las grandes preocupaciones que, en la actualidad, arrastramos los españoles. La puesta en marcha de esta nueva formación, LIBRES, tiene su raíz en una nueva idea de hacer política apoyándonos en un conjunto de ideas actualizadas, plenamente vigentes, que vienen a aportar soluciones a los problemas reales, aquellos que cada día quitan el sueño a tantos y tantos españoles. Por tanto, encaminado a construir una sociedad en la que nadie se sienta desvalido, olvidado, ni despreciado; apoyando y prestando atención a sus necesidades e ilusiones; una sociedad que garantice la dignidad y la igualdad de oportunidades de todas las personas.
Todo esto con normas simples y claras que son las que todo el mundo entiende, las que de verdad solucionan los problemas y que son las que afectan y promueven la libertad, la iniciativa y el desarrollo integral; respetando la economía y las decisiones personales de las mujeres y hombres que integran nuestra nación.
Así, “LIBRES” se constituye desde el convencimiento de que la Nación Española está integrada por el conjunto de ciudadanos libres, iguales y solidarios, sin exclusión ni discriminación, con el fin de contribuir democráticamente al progreso de nuestra sociedad hacia más y mejores cotas de bienestar y libertad individual. Así pues, sin menoscabo de la solidaridad amplia, pero bien entendida, con aquellos españoles que de verdad la necesiten y en un entorno de libertad y seguridad jurídica que permita nuevas oportunidades de rehacerse a quien tropiece, y lo haremos mediante la acción política fundamentalmente en las instituciones.
Volver a ser libres, mostrando esa alegría que nos es innata, leales a nuestro pasado y nuestras costumbres y tradiciones, tan atacadas desde todos los ámbitos en la actualidad; comprometidos con un futuro mejor a construir entre todos y para todos, juntos, mano a mano, hombro con hombro. Nadie nace siendo de derechas o de izquierdas. La España de las trincheras y del frentismo solo beneficia a quien, desde una posición de poder e inmerecida comodidad, azuza los odios de unos contra otros para conservar sus privilegios a costa del sufrimiento ajeno que inflige su irresponsabilidad. No dejemos que nos dividan, porque divididos todos seremos vencidos; mantengámonos unidos y venceremos.
Levantémonos como uno solo para volver a ser lo que siempre hemos querido ser: LIBRES. Superemos la España del conmigo o contra mí; trabajemos unidos para afrontar los retos que tenemos por delante a fin de construir una sociedad más justa, libre, y rica para nosotros y nuestros hijos.
Defendamos firmemente la unidad de España, sobre todo, ante los que quieren destruirla; reivindicando la Hispanidad como eje de un proyecto nacional, en hermandad con todos los pueblos. Hoy, más que nunca, tenemos que estar unidos, codo con codo. Nuestras diferencias no son nada en comparación con todo lo que nos une. Opongámonos a cualquier actuación, cada vez menos disimulada, de romper cualquier vínculo entre españoles, a todo intento de separatismo, a que nos dividan y enfrenten generando desigualdades territoriales intolerables.
Propugnemos la libertad como valor supremo derecho inalienable de todo ser humano. Una libertad que necesita de condiciones jurídicas, culturales, sociales y materiales para su ejercicio. Una libertad que, partiendo del derecho a la vida, requiere proteger la propiedad privada como derecho fundamental. Esto nos compromete a luchar por la igualdad de oportunidades y garantizar la dignidad de todos los ciudadanos, sin discriminación alguna por razón de raza, sexo, edad, religión e ideología.
No permitamos que los poderes públicos existan para limitar ningún derecho ni libertad, sino para garantizar el ejercicio de la libertad individual de todos y cada uno en el marco de una convivencia fraterna. Debemos combatir la partitocracia devolviendo el poder a los ciudadanos, para que elijan a sus representantes, de tal modo que este solo responda ante sus representados, y no ante los partidos, acabando así con el reiterado uso del mandato imperativo.
España necesita una regeneración democrática que recupere la confianza y la ilusión de los ciudadanos en sus instituciones. Para eso es imprescindible garantizar, no sólo la separación de poderes, sino en especial el equilibro que caracteriza un Estado de Justicia Social, Democrático y de Derecho. Ese donde la transparencia y la eficacia reinan y en el que nadie está por encima de la ley ni exista ninguna otra confeccionada a la medida de ninguno. Por eso es necesario promover una mayor participación ciudadana en la torna de decisiones mediante la iniciativa legislativa popular y la celebración de referéndum consultivos y vinculantes.
Somos españoles y eso significa que no hay montaña alta ni horizonte lejano que nos detenga. Nunca nos doblegamos ante la tiranía, la ignorancia o la miseria. No lo hicimos en el pasado y no lo haremos tampoco ahora. Cuanto más fuerte es la tormenta, más firmes somos en la defensa de nuestra tierra y nuestra gente. En esta época de incertidumbre, debemos construir certezas que den seguridad y confianza al mundo. Certezas basadas en aquello que nos une.
Habrá quien diga que no es posible. Habrá quien sienta miedo ante los cambios que se avecinan.
A ellos tenemos que recordarles cómo desde nuestras costas partieron barcos que se adentraron en lo desconocido. Aquellos hombres descubrieron tierra donde la mayoría creía que no había nada y cambiaron el mundo.
¡Seamos otra vez aquellas personas!
¡Seamos LIBRES!